Cuando se es parte de la máxima casa de estudios, no sólo como catedrático sino como alumno, se tiene acceso a oportunidades únicas. Ser alumno de la clase del Dr. Miguel Concha Malo, no sólo es motivador; sino una forma de estar en contacto directo con lo que distingue a la UNAM de cualquier otra universidad, y con ello me refiero a la didáctica que utiliza el Dr. Miguel. El simple hecho de compartir su opinión a través de sus publicaciones sabatinas en el periódico La Jornada, ya es una forma de aportar conocimiento a la sociedad, pero escuchar de propia voz su texto leÃdo directamente del periódico, implica compartir lo que es, siente y conoce.
El sábado pasado publicó una nota sobre la inexistencia de un vinculo entre la participación ciudadana y los legisladores mexicanos: "una propuesta sin participación ciudadana". Argumenta de buen modo que esta demás que el jefe del Ejecutivo Federal, ande por todos lados diciendo que su paÃs le interesa, razón por la cual, cada una de sus iniciativas de ley, van fundamentadas a partir de lo que la mayorÃa de los mexicanos solicitan. ¿Será que el jefe del Ejecutivo Federal se está perdiendo en métodos caducos para comunicarse con los ciudadanos? ¿Estará dejando a un lado las nuevas tecnologÃas, que si bien no son la panacea, hoy por hoy son los métodos de ubicuidad que llevaron a Obama a la presidencia? Es probable que esté buscando una forma de justificar los oÃdos sordos del jefe del Ejecutivo Federal, pero mientras tanto, es la única forma menos agresiva que se me ocurre para decir que Calderon ni si quiera sabe qué dirección seguir, tal como sucede en muchas de las organizaciones mexicanas.